El nombre de "Genciana" deriva del rey Gentio, rey de los esclavones, a quien se debe el uso en medicina de esta planta por primera vez. Este rey se dedicó a buscar y descubrir remedios y propiedades de las plantas.
La Genciana sirvió de elemento propiciatorio en antiguos rituales rosacruces, al igual que la Arnica y la Artemisa, también usadas en las ceremonias de esta Orden. En la tradición cristiana está dedicada a San Pedro.
Esta planta tuvo en la antigüedad varias aplicaciones mágicas. Fue uno de los componentes del ungüento de brujas para volar. Dicen que este ungüento elaborado con Genciana podía hacer correr a un caballo tres días seguidos sin darle nada de comer.